Tenga en cuenta lo siguiente cuando almacene alimentos para emergencias a nivel comunitario:

• Las personas con necesidades nutricionales específicas pueden requerir comida suplementaria además de una ración general. Esto incluye niños y niñas de 6-59 meses, personas mayores, personas con discapacidad, personas con VIH, y mujeres embarazadas o lactantes.
• En el plan de preparación hay que recoger datos sobre los requisitos especiales de dichos grupos.
• Almacene productos de suplementación, como comidas preparadas, de base lipídica, ricas en nutrientes, o polvos o pastillas con múltiples micronutrientes.
• Almacene alimentos compuestos enriquecidos, comida blanda enlatada, zumos y sopas para niños y niñas pequeños/as y personas con dificultad para tragar.
• Almacene utensilios y cubiertos adaptados para cubrir las necesidades de personas con un amplio rango de discapacidad y de dificultades de funcionamiento. Por ejemplo, utensilios pesados para ayudar a estabilizar las manos de las personas con enfermedad de Parkinson o artritis. Algunas personas con limitaciones funcionales de la parte superior del cuerpo necesitan pajitas para beber. Cubiertos con mangos más grandes y redondeados pueden resultar más fáciles de utilizar para aquellas personas con limitación funcional de la parte superior del cuerpo.
• Marque los artículos alimentarios para las personas ciegas con pintura en relieve, etiquetas magnéticas u otros medios adecuados.

En caso de emergencia, priorice la entrega a domicilio de comida a personas con discapacidad, personas mayores, y otras personas de riesgo, o establezca puntos de distribución de alimentos. Proporcione transporte accesible para que las personas con limitaciones de movilidad puedan llegar a los puntos de distribución de alimentos.