Consideraciones clave para hacer que los mecanismos de retroalimentación de la comunidad sean inclusivos y accesibles:

• Colaborar con las organizaciones representativas de los grupos de riesgo cuando se creen e implementen los mecanismos de la comunidad.
• Consultar con personas de diferentes grupos de riesgo cuando se cree el mecanismo de retroalimentación de la comunidad, en especial, con mujeres y niñas con discapacidad, personas ciegas, sordas o con dificultad de oído, personas con discapacidad intelectual o psicosocial y personas de grupos lingüísticos minoritarios.
• Evaluar las barreras específicas que evitarían que los diferentes grupos de riesgo puedan acceder a la información y ofrecer retroalimentación.
• Establecer múltiples canales para superar las barreras de acceso, por ejemplo, líneas telefónicas directas, buzón de sugerencias, una sección de retroalimentación en una página web, mensajes de texto/WhatsApp.
• Nominar una persona de enlace para que de la retroalimentación de la comunidad y asegurarse de que las personas de los grupos de riesgo conozcan el cargo. Asegurarse de que la persona de enlace conoce los problemas de la inclusión y que colabora de forma regular con las organizaciones representativas de los grupos de riesgo de la comunidad.
• Establecer formas activas de recogida de información (por ejemplo, entrevistas a domicilio con personas con dificultades severas de movilidad o con progenitores que no pueden salir de casa debido a su responsabilidad con el cuidado de hijos pequeños).